“Cazafantasmas: Apolacalisis fantasma”: un divertido homenaje lleno de nostalgia a la franquicia llevándonos de regreso al NY que amamos.
El director Gil Kenan con “Cazafantasmas: Apocalipsis fantasma” entrega una deliciosa y divertida cinta que además de ofrecer algo fresco, rinde un homenaje lleno de nostalgia a la franquicia original donde, juntos, los antiguos y los nuevos Cazafantasmas unen fuerzas y recargan sus paquetes de protones para salvar Nueva York. Juntos, en “Apocalipsis fantasma” pelean contra un nuevo gran mal sobrenatural y les aseguro que con más terror que la cinta pasada; no es que sea un hit instantáneo pero estoy seguro luchará por encontrar un nuevo público con su frescura y recuperar la vieja magia.
Esta frescura viene innegablemente encarnada por la joven Mckena Grace como la genio de la familia Spengler. Bueno, el carisma del elenco original también ayuda.
Cuando comienza “Apocalipsis”, la familia Spengler está dando vueltas en el Ecto-1 y enfrentándose a bestias fantasmas como el Dragón de Alcantarillado neoyorkino de Hell’s Kitchen. Y simultáneamente son una pesadilla de relaciones públicas envueltas en paquetes de protones de propulsión nuclear para la Gran Manzana: un poco de destrucción de la ciudad los pone en el radar de Walter Peck (William Atherton), el enemigo burocrático de los originales Cazafantasmas que ahora es alcalde. Él denuncia que Phoebe tiene solo 15 años y promete cerrarlos a todos, una amenaza que termina enviando a la estrafalaria joven a la banca.
Pronto necesitarán todas las manos a la obra. Cuando la unidad de contención de fantasmas de la estación de bomberos se llena peligrosamente, los Spengler se asocian con un centro de investigación paranormal fundado por otro héroe original, Winston Zeddemore (Ernie Hudson). Mientras tanto, un tipo holgazán llamado Nadeem (Kumail Nanjiani) llega a la librería de ocultismo de Ray Stantz (Dan Aykroyd) con un orbe propiedad de su difunta abuela. La fuerza maligna aprisionada en este artefacto se suelta accidentalmente, con el objetivo de formar un ejército de muertos vivientes contra la humanidad y provocar un gran escalofrío en la puerta de los Cazafantasmas.
“Apocalipsis fantasma” no escatima en recuerdos, e incluso incluye anuncios de juguetes antiguos y un vídeo musical de Ray Parker Jr. en la narrativa ficticia. Una gran cantidad de personajes heredados regresan, incluido el adorable Slimer: Peter Venkman de Murray tiene un par de escenas divertidas, la secretaria Janine (Annie Potts) finalmente llega a ser una Cazafantasmas y Ray es un ancla emocional importante como figura paterna y centro espiritual, quien aprovecha muy bien la inclinación de la franquicia por la historia extraña.
Si nos queremos ver muy críticos, con demasiada frecuencia la película parece perder completamente los nervios, con un guión que se aleja tan rápidamente de momentos de drama humano, horror legítimo, humor vanguardista o fantasía caricaturesca. Parece incierto a qué público quiere agradar entre niños, adultos o súper fanáticos de cualquier edad que buscan su dosis de nostalgia. La idea de tener la encarnación de la muerte desatada en la ciudad de Nueva York suena fascinante en el papel, pero lo mejor que la película puede conjurar para vender la amenaza es convertir la Gran Manzana en un paraíso invernal. Nunca tenemos una sensación real de que una de las ciudades más grandes y pobladas del mundo esté en tanto peligro sino solamente la estación de bomberos de Los Cazafantasmas.
La película parece no tener ni idea de qué hacer con los personajes adultos más allá de que simplemente aparezcan. Eso, sin embargo, no es nada comparado con cómo el guión desperdicia a la Phoebe de Grace. Después del problema con el alcalde queda marginada. Termina entablando amistad con una fantasma llamado Melody (Emily Alyn Lind), y sus largas conversaciones sobre la muerte, la muerte y la familia son lo más destacado de la cinta. Pero, entonces, la película casi obligatoriamente hace que ambas tomen decisiones extremadamente estúpidas por el bien de la trama que neutraliza la intensidad de su relación antes de que pueda echar raíces.
Olvidando este último detalle, la nueva cinta ofrece casi dos horas de diversión sana y familiar; perfecta reírse y querer inscribirte a la Academia de Cazafantasmas más cercana y, por supuesto, poder manejar el icónico automóvil Ecto1.
