MISÁNTROPO ¿tienes lo necesario para atrapar al asesino?
Por Andrés Naime @naiime
“Misántropo”, el primer largometraje norteamericano del director argentino Damián Szifrón es un thriller que yo llamaría “El silencio de los inocentes” para las nuevas generaciones. Quizá el título usado en EUA nos dejaría mas claro de qué trata la cinta: “To catch a killer” (Atrapara al asesino). Y justo de eso va este juego del gato y el ratón que el director de la nominada al Óscar “Relatos salvajes” (2014) nos ofrece.
La trama arranca cuando un asesino misterioso desata una masacre aterradora en la víspera de Año Nuevo en Baltimore, cobrando la vida de 29 víctimas. Utilizando astutamente los sonidos de los fuegos artificiales como tapadera, el francotirador invisible sigue siendo invisible. Eleanor Falco (Shailene Woodley), una joven policía con problemas que descubriremos posteriormente, logra identificar la ubicación del francotirador. Sin embargo, su intento de reunir pruebas se ve frustrado cuando el francotirador hace explotar el apartamento desde donde lo hace y huye de la escena. A medida que el caso llama la atención de todos los medios, se asigna al investigador en jefe del FBI, Geoffrey Lammark (Ben Mendelssohn), para dirigir la investigación. Impresionado por la participación inicial de Eleanor, y reconociendo su potencial, la incluye como parte del equipo de investigación.
Si bien es principalmente un drama criminal en lugar de un misterio de descubrir al asesino, conserva los elementos de una novela policíaca durante la mayor parte de su tiempo de ejecución. Vivimos junto con los personajes la angustia de encontrar pistas sobre la identidad del asesino antes de que vuelva a atacar. Y es ahí donde el trabajo de sus protagonistas hacen que el guión de Szifrón tome fuerza.
Shailene Woodley, cuyas cintas anteriores como “Los descendientes”, “Divergente” o la serie “Big little lies” nos dejan claro su nivel actoral y nos recuerda vívidamente a una joven Clarice Sterling (Jodie Foster) deduciendo y buscando pistas desesperadamente para atrapar al asesino de su cinta ayudada por Hannibal Lecter. Reforzada con la presencia actoral de Ben Mendelssohn como su mentor, ambos ofrecen cautivadoras actuaciones, dando frescura y profundidad a los dos personajes fuera de los comúnmente vistos en este tipo de historias policiacas.
Los segmentos iniciales de la película generan anticipación, insinuando una emocionante montaña rusa que se nos avecina. Las escenas de disparos se ejecutan con un realismo crudo que efectivamente envía escalofríos a todos en la sala del cine. La dirección de Szifrón nos cautiva desde el principio, estableciendo un tono tenso y lleno de suspenso haciendo de “Misántropo” una experiencia cinematográfica estimulante, entretenida y en su desenlace una crítica muy clara sobre nuestra sociedad actual.
